Hace unos años era impensable que la tecnología se impusiera en nuestras vidas de la manera que lo ha hecho, la importancia que han cogido los teléfonos inteligentes en nuestras vidas es algo que los abuelos todavía no entienden, donde han quedado las cartas metidas en sobres, y los libros leídos en papel, y las guías telefónicas que almacenábamos en casa. Todo esto ha quedado relegado a un segundo plano ya que actualmente nuestro mejor amigo es nuestro teléfono inteligente.
Y es que todo, absolutamente todo lo que hacemos en nuestra vida cotidiana tiene que ver con nuestro teléfono, para empezar no salimos de casa sin él, que tenemos una duda la consultamos con él, que necesitamos una dirección se la consultamos a él, que buscamos un restaurante cercano también le preguntamos a nuestro teléfono, hasta buscamos amistades y pareja por este medio y es que solo con rellenar un formulario y contestar a varias preguntas tu teléfono hace un filtro y te dice con que personas eres compatible y con cual no. Lo último es poder abrir una cuenta corriente directamente con nuestro teléfono sin tener que personarte en la sucursal bancaria, te tomas una foto y ya, ya puedes disponer de una cuenta.
Y es que se ha convertido en una parte imprescindible de nuestras vidas, antes esperábamos a ver el tiempo tras el telediario para saber si iba a llover, ahora solo con apretar un botón tenemos la previsión meteorológica de catorce días, pero es que la cosa no acaba aquí, si no puedes hacer la compra porque no te ha dado tiempo, también lo puedes gestionar todo con tu teléfono y te lo llevan a casa sin tener que moverte de la oficina.
En unos pocos años, nuestros coches se controlaran con nuestros teléfonos incluso podremos encender la lavadora o activar la olla de la comida para llegar a casa y que este todo listo, y es que todo está diseñado para que en un futuro próximo con nuestros teléfonos podamos gestionar nuestra vida y la de los nuestros solo con programar una alarma o dejar un aviso, no es de extrañar que cada vez halla mas adictos a los teléfonos ya que son una constante en nuestras vidas tanto de mayores como de pequeños, si antes se decía cuando tenías un hijo que venía con un pan debajo del brazo, ahora lo hacen con un android incorporado.